• Senador Rodrigo Galilea sostuvo que “tiene asuntos complejos y errados, porque plantear que en Chile se puede indultar ampliamente a quienes han cometido homicidios frustrados, lesiones graves, incendio y queden completamente impunes, es un sin sentido absoluto”. 

 

La bancada de senadores de Renovación Nacional reiteró hoy su rechazo al proyecto que busca indultar a personas detenidas en el contexto del estallido social de octubre de 2019 y, junto con un llamado a apurar la revisión de las causas, manifestaron que no se puede justificar la violencia ni amparar la impunidad para quienes actuaron fuera de toda norma de convivencia y sin la humanidad a la que hoy algunos apelan para amnistiar a quienes deben ser juzgados por los Tribunales.

El integrante de la Comisión de Constitución, senador Rodrigo Galilea, afirmó que se trata de un proyecto que “tiene asuntos complejos y errados, porque plantear que en Chile se puede indultar ampliamente a quienes han cometido homicidios frustrados, lesiones graves, incendio y queden completamente impunes, es un sinsentido absoluto”.  

Agregó que “no podemos olvidar jamás que todas nuestras libertades tienen dos requisitos básicos: que sean pacíficas y sin armas”.

Los Senadores (ind pro RN) Carmen Gloria Aravena y Kenneth Pugh, afirmaron que “el día que nosotros validemos de una u otra manera que nuestro derecho a manifestarnos puede ser ejercido con violencia o con armas, estaremos dando un paso nefasto para la convivencia cívica de nuestro país”.

La senadora Marcela Sabat Precisó que «una cosa distinta es pedir que se agilicen las causas, pero un perdonazo para quienes están siendo juzgados por hechos que afectaron a miles de pymes y chilenos, simplemente no corresponde«.

En esa línea, precisaron que «en nuestro país no hay personas encarceladas por sus ideas, sino por delitos graves, como homicidio, robo, incendio o activación de bombas, y por tanto, hay que dejar que las instituciones hagan su trabajo, tanto la Fiscalía como el Poder Judicial«.

Finalmente, sostuvieron que «sería una pésima noticia para la justicia en Chile, y generaría un incentivo perverso: ¿cómo podremos asegurar la seguridad pública, en nuevas revueltas o estallidos sociales, si la gente sabe que, haga lo que haga, después vendrá un perdonazo? Es importante dar buenas señales de que en Chile las leyes se respetan; de lo contrario, se perderá absolutamente el Estado de Derecho«.